Una vez instalados, son capaces de robar silenciosamente datos críticos y comprometer los monederos de los usuarios sin que necesariamente se den cuenta.

Esta tendencia pone de manifiesto el cambio de estrategia de los ciberdelincuentes, que ahora se centran en las vulnerabilidades relacionadas con los navegadores para aprovecharse de la creciente popularidad de las criptomonedas.


El valor de la precaución y las manos seguras

Dado que las amenazas van en aumento, los usuarios de criptomonedas deben extremar la vigilancia. Los riesgos pueden paliarse comprobando y controlando periódicamente las extensiones del navegador y asegurándose de que han sido desarrolladas por fuentes de confianza. Además, el uso de herramientas de seguridad como las carteras de hardware y la autenticación de 2 factores proporciona una protección adicional.


Esto es especialmente significativo cuando se trata de plataformas que procesan datos sensibles u operaciones financieras más allá de los sistemas establecidos. La mayoría de los casinos no-KYC que no verifican la identidad de sus usuarios aconsejan a sus usuarios jugar con vpn para permanecer en el anonimato y realizar transacciones seguras. Esta práctica está cobrando importancia a medida que aumentan los exploits basados en navegadores, especialmente en ámbitos en los que la privacidad es un argumento de venta.


Estas plataformas también suelen tener licencia internacional en países como Panamá y Curaçao, donde el uso de VPN no sólo está permitido, sino que se fomenta para aumentar la seguridad. Al utilizar cualquier servicio que funcione con transacciones de criptomonedas, en particular los que se centran en mantener el anonimato, es útil añadir herramientas de privacidad como las VPN para construir un espacio en línea más seguro.


La aparición de complementos de navegador maliciosos

En 2025, las extensiones de navegador maliciosas se van a convertir en una amenaza significativa para los usuarios de criptodivisas. Recientemente, The Hacker News ha informado de que se han descubierto más de 40 extensiones falsas de Firefox creadas para hacerse pasar por monederos de criptomonedas como MetaMask y Coinbase. Estas extensiones fueron construidas para robar información sensible como claves privadas y frases semilla, lo que supone un importante riesgo de seguridad para los usuarios desprevenidos.


Este problema no es único. Chainalysis informó que los hackers de criptomonedas robaron alrededor de 2,2 mil millones en 2024, lo que representa un 21 por ciento más que el año anterior. Es importante destacar que el vector de ataque más popular fueron las claves privadas comprometidas. Esta tendencia señala el hecho de que los atacantes se están moviendo hacia tácticas más íntimas y encubiertas, como el robo de credenciales a través de los navegadores, y las extensiones maliciosas se están convirtiendo en un grave riesgo para los criptousuarios ordinarios.


Las fuerzas de seguridad también han prestado atención al alcance de la amenaza. La Comisión Federal de Comercio de EE.UU. (FTC) ya ha publicado varias alertas a los consumidores y artículos educativos sobre las extensiones criptográficas fraudulentas y ha declarado que han estado vinculadas a esquemas de fraude masivo. Estos avances representan una transformación continua en el enfoque de la ciberdelincuencia, en la que el pirateo directo del intercambio se sustituye por ataques menos perceptibles y orientados al usuario que se integran en el uso rutinario de un navegador.


Cómo detectar y prevenir las extensiones maliciosas

Aunque uno pueda pensar que la extensión del navegador debe ser segura ya que se ofrece en una tienda oficial, las cosas no siempre son como parecen. Las extensiones maliciosas suelen disfrazarse de marcas de confianza, incluyendo iconos, nombres y diseños de interfaz familiares. La mejor manera de evitar esta trampa es ser cauteloso al personalizar el navegador como criptousuario.


Asegúrese de comprobar la identidad del editor de cualquier extensión relacionada con cripto antes de instalarla. Los verdaderos proveedores de monederos suelen tener un enlace directo a su extensión de navegador en su sitio oficial. Busque extensiones que tengan pocas descargas, descripciones poco claras o reseñas que indiquen actividades sospechosas. Incluso las extensiones mejor valoradas pueden ser pirateadas en caso de que las actualizaciones contengan código malicioso, por lo que es necesaria una vigilancia constante.


También hay que considerar la posibilidad de reducir el número de extensiones instaladas, sobre todo cuando se utilizan monederos o intercambios de criptomonedas. Cuantas menos herramientas haya en un navegador, menor será la superficie de posibles ataques. El riesgo puede mitigarse auditando periódicamente la lista de extensiones y desinstalando todo lo que no se utilice. El entorno moderno de las amenazas es tal que un complemento inadvertido puede utilizarse como punto de entrada para el robo digital.